Zurich Maratón Sevilla

Sevilla, Domingo 23-02-2020

Clasificación : 

Jorge Criado: Por fin me animo a escribir mi primera crónica y que mejor que hacerlo con mi primera maratón y rodeado de mis amigos-compañeros y familia.
Hace un año salió la locura de hacer una maratón por los 40 años que cumplí y de rebote animé a mis compañeros.
La ilusión inicial impulsaba todo. Todo parecía lejano y sin embargo las semanas empezaron a volar.
Llegó el día antes y los nervios se apoderan de uno.
Estamos en la salida juntos y he de reconocer que estaba como un flan.
Empezamos los primeros kilómetros cogiendo ritmo y a relajarse uno para que la tensión no se apodere del cuerpo.
Tal y como me dijo mi gran maestro en atletismo, me dejé llevar por el mantra del ritmo.
Pasan los kilómetros y me veo cómodo al ritmo que Chamorro nos llevaba. Un poco antes del 30 el cuerpo está de subidón y me veo capaz de todo. Sin saber cómo, empecé a poner un ritmo alto que luego lo pagué en el 37, aunque no me arrepiento. Chamorro me cogió y me llevó como un reloj hasta meta. Incluso hubo algún gramo de fuerza para esprintar! Al final 3h13′, haciendo la segunda media 3′ más rápido que la primera. Una locura. Me fundí en un abrazo enorme con Chamorro por todo lo que ha trabajado para llevarnos hasta este día en perfectas condiciones. Luego empiezas a acordarte de todo el mundo.

Por último, quiero agradecer a la familia por su paciencia (en especial a mi mujer), a mis compañeros por los entrenos y por los ánimos, y también a Chamorro por guiarme tan bien para hacerme llegar en condiciones. Son 30 años conociéndonos y con una mirada ya sabe como va todo.
Por todo ello, mil gracias a todos.

Manolo Jiménez: Desde el grupo de los Fruitis, surgio la idea de ir a la Maratón de Sevilla. Comenzamos en septiembre a preparar con el buen hacer del amigo y compañero Chamorro. Tuvimos días de calor, frio, lluvia, incluso de buenos ratos y celebraciones.
Ya en Sevilla, nos tocó, madrugar, teníamos que estar en el cajón antes de las 8.30 horas.
En carrera coji mi ritmo y fueron pasando los km, iba muy bien, disfrutando con la gente, charlando con los corredores, haciendo bien los repostajes.
Y así hasta el km 30 donde los cuádriceps empezaron a dolerme, me costaba subir las piernas y la zancada cada vez más corta.
Ya cerca de meta estaba nuestra gente donde sus ánimos me ayudaron a acabar los últimos metros. Que subidon cuando crucé la meta.
Quiero agradecer a todos los Fruitis, Chamorro, Jorge, Javi, Tomás, Juan Carlos, David, Manuel y Pilar, que me cuidan como nadie.
Hasta la siguiente.

Juan Chamorro: Cuando hace un año surgió la idea de hacer la maraton tenía mis dudas si físicamente podría hacerla ya que durante los últimos años no había podido ser muy constante en los entrenamientos. Debido a muchos factores.
Pero me lie la manta a la cabeza y a por ella. Con el añadido que confiaban en mi para conseguir finalizarla. Por supuesto sin dejar de entrenar a los demás compañeros.
Con la ayuda de mi entrenador de siempre,que en cuanto se lo comente me dijo que por supuesto,pero que debía adaptarlos para sus características,comenzamos los entrenamientos.

Intentando aprender y disfrutar de todo lo que conlleva un maraton que para mi es una cosa más seria de lo que mucha gente piensa,siempre con respeto fuimos quemado etapas y entrenamientos juntos y en solitario. Con días malos y buenos, días que te hacían dudar y otros que te confirmaban que era posible.
Llego el momento y allí estábamos en la salida. Los nuevos Manolo,Jorge,David y Chuchi. Javi que ya había hecho alguna y un servidor.
Lo más importante era acabarla y disfrutar dentro de lo posible. Pistoletazo de salida y primeros km de toma de contacto coger ritmo y a por ella.
Empezamos todos juntos menos Manolo que salía más atrás y a su ritmo. Es una carrera que va poniendo a cada uno en su sitio.
Mi idea era intentar hacer una carrera de menos a más y así fue. Hasta la media fuimos juntos David,Jorge y yo. Ahí se quedo David. Continuamos hacia adelante manteniendo el ritmo. Hubo un momento en que nos separamos y costó un poco juntarnos. En el km 37 nos volvimos a juntar y acabamos juntos. En un tiempo que para nosotros era un logro y unas sensaciones de haber conseguido el objetivo principal acabar la maraton.
Desde aquí agradecer a los compañeros la confianza depositada en mi. A las familias aguantar los entrenamientos. El acompañarnos y en el caso de Jorge y Mío hasta hicieron pancartas y camisetas. Toda una sorpresa.

Chuchi Fresno : Cuando los amigos Fruittis me dijeron lo ir a Sevilla, pues que como la cosa no iba conmigo, pero poco a poco me lo metieron en la vena, y palante con el reto. A mí personalmente no me llama nada estos eventos , apuntarse con mucha antelación, el dinerito que vale y te cobran por preguntar, me parece excesivo, y luego encajonados, yo pensando en esos pueblos que voy , sin agobios , sin prisas, disfrutando de sus caminos y luego echo el café en el bar , y vuelvo para casa, satisfecho. Bueno Sevilla y olé, como en muchas ciudades, había tramos del recorrido desangelado, y luego había otros de 10, con música y la gente animaba llamándote por tu nombre, los voluntarios un 10. En esta aventurae marcaba un reto, hacer el Maratón sin ninguna preparación especial, solo hice una tirada larga 33 km con los compañeros, y que el día siguiente tenía que salir a correr y estar como una rosa, reto conseguido, decir que llevo casi tres meses parado, más contento todavía, agradecer a todos los compañeros y sobre todo a las familias lo que nos han apoyado, a por el próximo reto.

Javi Barbero : Después de preparar durante meses, otra gran aventura q supone una maratón, con mucha ilusión y compartiendo buenos entrenos con mis compañeros y amigos ” los fruitis”, llegó el gran día…
Físicamente, creo q mejor q otras veces q me he enfrentado al reto de 42k, pero no siempre acompaña la cabeza y esta vez, casi me puede.
La primera mitad ni me enteré de los kms…entre posicionarnos y pensar en cómo iban mis compañeros; pero a partir del 26k la cabeza me pedía parar, a pesar de q me encontraba bien, el disminuir el ritmo de zancada hizo q las rodillas se cargarán y me doliera a cada paso, pero el saber q en meta me estaban esperando, con la ayuda de Chuchi q me fue esperando y un poco de cabezonería, conseguí terminar otra más.
Gracias a tod@s los componentes y familia de los fruitis por los ánimos y ayuda.
Pensando ya en el próximo reto.

David Escudero : Mi primera maratón, la locura que empezó hace poco más de un año.
Al principio me lo tomé como una broma, pero cuando me quise dar cuenta tenía el dorsal y el hotel reservado: ¡Ya no había vuelta atrás!
Me había embarcado en esta aventura que iba a ser todo un reto para mí…
Poco a poco, empezaron los entrenamientos de preparación. Iban bien hasta que llegó enero, tocaba estudiar y a penas tenía tiempo para entrenar. Además, los ánimos en ese momento no acompañaban…hasta que llegó el día de probarse: tirada larga 32 km de prueba. Me sirvió para coger los ánimos que necesitaba y darme cuenta que era posible acabar el gran desafío.
Llegó la hora de la verdad, ¡nos vamos a Sevilla! dónde la famila me acompaña. Allí recogemos el dorsal y empiezan los nervios, quedaba un día para el gran desafío.
Domingo 23 de febrero de 2020, un día que no olvidaré jamás. Lleno de vaselina y con un chubasquero de plástico me encaminaba a la salida dónde me reuniría con el resto de compañeros.
Al principio todo eran risas, pero empezaban los nervios… Estamos en el cajón de salida y ya solo quedaba tirar para delante.
Un abrazo conjunto con mis compañeros me hizo coger la energía que necesitaba. Era el más pequeño, pero no por eso iba a ser uno menos, me sentí arropado por todos ellos. Así pues, arrancamos a correr y la carrera comienza: llevamos un buen ritmo al que voy a gusto, la motivación estaba a tope, los 10 km sin problema, media maratón a penas me entero… A partir del kilómetro 25 parece que ya me empiezo a dar cuenta de que estoy corriendo y ya se nota, sigo avanzando la carrera, geles, Acuaryus y agua, mucho agua de por medio. Kilómetro 35, parece que las piernas también se han dado cuenta de que estamos corriendo. No puedo más y toca bajar el ritmo.
Cada kilómetro se hace eterno, un “¡¡Vamos David!!” Me da el chute de energía que necesitaba. Era mi familia y el resto de acompañantes, ya solo pensaba no puedo parar, si paro ya no avanzo, llega el kilómetro 39 y me encuentro con un conocido que me decía que no podía más, así que le dije que teníamos que acabar y tenía que ser juntos. Doble motivación, no le podía dejar tirado, llegó el kilómetro 41 pasamos por un arco y a penas quedaba nada, no podíamos más, la familia estaba apoyando en la meta, tan emocionada cómo lo estaba yo, lo estaba consiguiendo, iba a acabar mi primera Maratón.
Cruzamos la línea de meta y fue tan emotivo el abrazo que nos dimos ambos corredores que fuimos al suelo, ya ni nos dolía, no teníamos más fuerzas.
Estaba desubicado, no sabía ni dónde estaba, me encontré con dos compañeros y la alegría fué brutal: ¡lo habiamos conseguido!
Fueron llegando el resto de compañeros y ya la felicidad era máxima. Recuerdo el reencuentro con la familia, me sentía el hombre más feliz del mundo, no me cambiaba por nadie…
Sin duda, fueron las 3 horas 28 minutos y 49 segundos más felices y duros de mi vida, pero esos 42,195 km no pudieron conmigo.
A seguir sumando carreras y desgastando zapatillas.

V Milla solidaria Peñaranda de Bracamonte

Peñaranda de Bracamonte (Salamanca) , Domingo 23-02-2020

Véronica Sánchez: Carrera muy rápida, pero “sarna con gusto no pica”.
Amante de las distancias cortas y sabor a sangre… me presenté en Peñaranda dispuesta a dar el 500 %.

Me mantuve toda la carrera al lado de Sara, la ganadora de la prueba. Ella apretaba, yo apretaba; ella levantaba el pie del acelerador, yo apretaba… y ella respondía.

Fue un bonito duelo.

A falta de 700 metros pensé en decirle que si quería, entrábamos juntas; hubiera sido un buen final y un bonito gesto para el público. Sin embargo, escasos segundos después, Sara cambió el ritmo de una forma magestuosa, sublime.
Pude intentar seguirla, pero la distancia hasta meta era demasiada y supe leer mi cuerpo.

Apreté un poco para mantener la segunda posición y entré entera y feliz a mi llegada al arco.