5ª Endu running La Trabancada

Nava del Rey, (Valladolid) Domingo 13-03-22

Clasificación:

Ricardo Adrados:

“El no rendirse”
Cuando Juan nos contaba como no se rindió en la media y eso dio su fruto no sabía que nos iba a contagiar esa idea.
En Nava elegí la carrera larga de 21 km pensando que sería asequible, pero no iba a ser así.
Por la noche llovió a destajo y los caminos estaban llenos de barro.
Desde la salida un atleta se marchó en solitario y el resto formamos un grupo de 12,  a pelear y empezaron las cuestas y los patinazos bajando los bosques de pinos.
A mitad de carrera los caminos pasaron a pistas de tierra, era divertido elegir rodera a seguir.
Luego llegó el km 15 y las cuestas y más cuestas y el grupo se disgregaba en pedazos.
Por fin km 20, ya queda 1 y hay una ermita en lo alto, te pasa una idea tonta por la cabeza: no se les ocurrirá subirnos al cerro?.. Pues toma postre y ya es el km 21 (ahí todos pensamos en subir andando, pero como vienen detrás hay q aguantar). Y bajas por charcas de agua y pasas el km 22 y empiezas a preguntar al público: ¿ Donde está la meta?
Por fin km 22400 y llegas al límite físico. Primero de la categoría y séptimo de la general. Reventado y con tirones continuos, es la primera vez que no soy capaz de subir al pódium, me dan el premio abajo y 3 horas delante del coche sin poder ni siquiera subirme. No rendirse oyendo a Juan o a Roberto es bonito, pero en un mortal como yo….

Tres Valles (Porvenir)

La Alberca, (Salamanca) Domingo 13-03-22

Clasificación:

Edw Fiz:

“Crónica de un regreso”
Regresaba uno de los referentes del trail nacional después de que el año  pasado, que era cuando tenía que haberse celebrado, no fuera así por culpa de la pandemia. Y yo regresaba después de 2 años y 8 meses sin competir. Y que mejor sitio para hacerlo que aquí. Esta vez tuve que optar por la opción más corta que aún así tiene toda la esencia Tres Valles . “Porvenir” , con 11,5 km y 550 metros de desnivel. Después de más de dos años sin poder correr y cuando llevas mucho tiempo pensando que no vas a poder volver a hacerlo esto se convierte un reto. Desde que en enero abrieron las inscripciones me propuse que lo tenía que hacer. Tenía que volver a correr.

A menos de 10 minutos de comenzar Aída y yo nos situamos en la línea de salida. Fueron unos minutos de nervios, de ilusión y de emoción por lo que se venía. Segundos antes de las 10 comienza a sonar la canción que se ha convertido en el himno de la carrera (Come on! – The Hives).
Cuenta atrás y nos vamos , por delante 11,5 km de pura Magnetotermia . Salimos de la plaza hacía la Ermita de San Blas y al llegar a la fuente allí está animándonos mi pelirroja, le doy un beso y a seguir.
Salimos a una pista por la que rodaremos unos 4 km de ascenso suave hasta que nos encontramos con un cortafuegos de algo más de 1km que nos llevará hasta la Peña Carbonera. Toca agachar la cabeza, pasos cortos y a la guerra. Cada vez que veía parar a Aída le decía que no me esperase , que si necesitaba parar lo hiciera pero que no lo hiciera por mi, ahora mismo mi forma física está en las antípodas de la suya.
Al llegar arriba podemos comenzar a correr aunque yo tengo que hacerlo unos metros más tarde para recuperar mis lumbares.
A partir de ahí ya nos empezamos a distanciar. Poco después llegamos a una de las dos zonas técnicas de la carrera, manos a las piedras y a avanzar despacio pero asegurando. En esas zonas junto con el cortafuegos es donde más se separaron todos los corredores. Es una modalidad en la que hay mucha gente que se inicia en este tipo de carreras y en esas zonas se notó, pero no se oía otra cosa que no fuera alabar lo espectacular de la carrera.
Al salir a una pista forestal…. ¡Sorpresa! Oigo una voz conocida…. No podía ser otra , allí estaba mi querida Eve con los brazos abiertos… Nos dimos un abrazo y a continuar.
Durante unos minutos o bien Aída me llamaba a mi o yo a ella para seguir en contacto ya que no nos veíamos. Llegamos a la Peña del Huevo y ya no volvimos a contactar. Otra zona técnica y desde ahí hasta el portillo es una de las zonas más especiales de la carrera. Una zona de silencio, en la que dan ganas de quedarse a admirar las vistas, un momento en el que vemos el Monasterio de las Batuecas , ahí abajo, tan lejos, y a la vez tan cerca.
Seguimos serpenteando por la ladera, como ya ha llovido algo la tierra está húmeda y hay que ir con cuidado. Aún así, fui al suelo una vez aunque sin más consecuencia que las manos llenas de tierra, la cual me quité en un pequeño reguero de agua que bajaba unos metros más adelante. A falta de dos km llegamos al Portillo. Ahí ya sabemos que es todo para abajo. En el primer tramo de sendero no solo bajábamos los corredores, también lo hacía el agua. No se podía quitar la mirada del suelo hasta salir a un pequeño tramo de pista que nos llevaría a otro sendero ya sin agua. La cabeza ya te va diciendo que está hecho. Entramos a la alberca por la calle Prados. Ahí se disfruta del último momento de silencio que solo rompe los ánimos de algún espectador. Al doblar la esquina en la plaza de la iglesia ese silencio se transforma en emoción, doblan las campanas , la gente te anima seas el primero o el último. Antes de entrar en la plaza allí está Raquel de nuevo, siempre al pié del cañón, y esta vez con doble esfuerzo ya que estaba pachucha.

Nada más dejar atrás la iglesia ya se oye a los maestros de ceremonias Depa y Tate. Giras a la derecha y allí está el arco de meta. Creo que todos un poco más o menos nos emocionamos al llegar allí . El reto estaba conseguido. He vuelto a correr sin molestias y al disfrutar de esto.
Y al pasar el arco de meta allí está el culpable de todo esto, allí está Manu , un loco más que se puso a correr por las montañas como si no hubiera mañana y ha conseguido con su carrera engancharnos a muchos a esta locura. Hay que abrazarlo, merece todo el reconocimiento. Me emociono al decirle que pensaba que no volvería a poder correr. Eso de momento ya quedó atrás. Ahora toca volver a disfrutar.
Enhorabuena desde el primero al último de todos los que hacéis posible lo que hemos disfrutado.
Tres Valles se ha vuelto a superar…
Y lo seguirá haciendo….
Nos vemos en Tres Valles 2024….
¡COME ON!

Media Maratón Cervantina, Legua Quijote

Alcalá de Henares, (Madrid) Domingo 13-03-22

Clasificación:

José A. Ronco:

Viendo el nivel de las crónicas os advierto que yo soy más de números que de letras.
“El Plan” #7
Este domingo 13 llegábamos a la estación #7 de “El Plan” con parada en Alcalá de Henares. Mi amigo José M me comentó que correría una legua en Alcalá y que también había Media Maratón. Comprobé mis horarios y “bingo”, libro el 13.
“El Plan” me indica que debo de hacer una Media Maratón o 25k así que le comento a José M que después de la Media le acompaño en la Legua.
A las 9:30 da la salida de la MM Cervantina y veo que con el paso de los kilómetros las piernas me van cada vez mejor. Se notan los entrenamientos de “El Plan”. Hoy el crono no importa, hoy lo que busco son buenas sensaciones para seguir con “El Plan”y finalizarlo el 24 de Abril en Madrid. A mitad de carrera los ánimos de José M me dan un buen empujón. Con el paso de los km me voy preparando mentalmente para un bajón , como en otras carreras largas, pero en esta ocasión no llega y alcanzo la meta sorprendido de acabar bastante entero y con unas sensaciones increíbles. Hay hambre de Kilómetros. Posiblemente sea la Media que más he disfrutado corriendo. Me marcho trotando hasta el coche para cambiarme ya que en 45’ empieza la Legua y allí me espera José M.(un tío de letras-No os perdáis su crónica)
Breve charla, calentamiento y al lío con un objetivo marcado. Salida lenta por la cantidad de corredores pero en unos metros cogemos un buen ritmo y no lo soltamos hasta la meta. Un lujo poder disfrutar con amigos como José M de estos kilómetros y encima cumpliendo de sobra el objetivo.
Enhorabuena por la carrera a Periko (Maratoniano Salmantino), Alex (Malpartida Activa), José M. y l@s Macoteranos que encontramos en meta.
Por cierto totalmente recomendables ambas carreras. Muy buen ambiente, circuito totalmente llano y grandísima organización por parte del Club de Atletismo A.J. Alkalá.

José Manuel Blázquez:

“En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de la lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor…” así comienza Don Quijote de la Mancha.
Hasta la ciudad de Don Miguel de Cervantes,  Alcalá de Henares, fui a correr la Legua Cervantina.
Mi amigo Ronco corría antes la media Maratón y peleó contra esos gigantes que esta vez no eran molinos de viento sino que éstos se habían convertido en 21 kilómetros.
Luego cómo buen Don Quijote y buen caballero se dispuso a acompañarme en mi carrera.
Me siento muy afortunado por poder compartir carreras con él pues me enseña, me anima, me motiva, me frena cuando me acelero pero sobre todo comparto charlas que tanto necesito con mi amigo.
Es una carrera muy rápida y muy fácil pues es totalmente llana. Ronco me lo dice mientras calentamos y le digo el tiempo que querría hacer y me lleva clavado en cada kilómetro.
Hay mucho ambiente, mucho público animando por todas las calles céntricas y que te hacen imaginar que vas montado encima de Rocinante.
El final se me va un poco pues soy muy débil de cabeza pero como buen Sancho Panza y fiel escudero sigo las indicaciones de Ronco y llegamos a meta.
He cumplido con el tiempo que tenía tenía en mente y me siento muy orgulloso por mi esfuerzo.
Mientras estiramos varios paisanos de Macotera se acercan a saludarnos y nos pegamos un buen parlao. Algunos nos dicen que que septiembre se apuntan al club.
Orgulloso de pisar la tierra de Don Miguel de Cervantes pero estoy seguro que él también lo estaría de pisar Macotera.

“No ha sido otro mi deseo que poner en aborrecimiento de los hombres las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías, que, por las de mi verdadero don Quijote, van ya tropezando, y han de caer del todo, sin duda alguna. Vale.

Todos los días sale el sol.