101 Km 24 Horas de La Legión 2019
Ronda, (Málaga), Sábado 11 y Domingo 12-05-2019
Toñi Hernández: “Llevo haciendo deporte toda la vida. Hice ballet, gimnasia, patinaje artístico, baloncesto, atletismo, natación, buceo, senderismo, aprendí a esquiar y hasta un poco de Snow. Me gusta todo lo que tenga que ver con el deporte y sentirse” vivo”.
Carrera nocturna de Modúbar
Burgos, (Burgos), Sábado 11-05-2019
Juan Antonio Bueno (Falogo) : “Hace ya tiempo que me hablaron los amigos de Burgos de la nocturna de Modúbar, en esta ocasión fue Juan quien nos enzarzó. No fue muy difícil convencerme. Una ciudad donde viví unos años y a la que voy menos de lo que quisiera. Allí sigo teniendo familia. El sábado poco después del mediodía, camino hacia las tierras del Cid.
Después de recoger el dorsal en el Museo de la Evolución Humana, me encontré con Olalla y Juan, luego con mi hermano y Cristina. Paseo por Burgos, una cervecita y a cenar prontito que había que correr.
A las 10 quedamos por los alrededores de la salida, comenzamos a juntarnos los del Club y algunos que en su día lo fueron y hoy están en otros pero con los que conservamos una buena amistad.
Llega la carrera. Hacía mucho aire y frio, por estos lares lo llaman fresquito. Aquí, como en “la San Rocada”, también hay introducción musical antes de la salida. Nosotros bailamos la charrá, ellos cantan el himno a Burgos. Aún recordaba algunas estrofas de cuando en el espolón lo cantaba de niño. “Aprendamos todos juntos a querer a nuestra tierra”…
Salida, mucha gente, tiene que ser un espectáculo, desde fuera, ver a 3000 personas con los frontales encendidos formando una gruesa y larga fila. Somos muchos, es difícil adelantar. Voy acomodando mi ritmo con los que tengo alrededor. Salimos de la ciudad, cogemos la vía verde (antigua vía de tren minero) que nos llevará hasta Modúbar.
Transcurren los kilómetros, risas y conversaciones a mi alrededor, buen ambiente. Alguna vez digo algo a algún corredor. No hablo mucho, aunque parezca raro. Voy cómodo, el ritmo no es muy rápido para mí. Llegué a la altura de Pascual, iba con un amigo que había corrido la 10ª San Rocada, me describió como era el recorrido, subimos hasta el 8’5, subida ligera pero subida, llegamos a un túnel y tendencia a bajar hasta el 11’5, giro a la izquierda y comienza la cuesta con más pendiente hasta llegar a meta, sin darnos cuenta perdimos a Pascual.
Llegamos al túnel del tren que me habían descrito (700 m). Hasta el final del mismo el sonido grabado de una máquina de tren suena constantemente, me resulta gracioso y me evoca otros tiempos.
Quise reservar fuerzas para no quedarme en la cuesta. No era para tanto, una vez termina, giro a la derecha y meta. Lo primero que me dije nada más cruzar fue ¿ya se ha acabado? Se me hicieron cortos los 13 km. Tiempo 1:05:49. Ritmo de 5:05, por eso se me hizo tan llevadero y disfrute mucho más de la carrera. El último kilómetro estaba jalonado con antorchas, espectacular. Al cruzar la meta, saludo a mi hermano (estaba de fotógrafo). Comenzaron fuegos artificiales. Ya sé que no eran en mi honor, pero yo me lo tomé como tal ¿Por qué no?
En el pabellón, de todo para reponer fuerzas, caldo calentito, chocolate, café, leche, pastas, bollería de todo tipo, fruta, agua, bebidas, frutos secos… Vamos, de todo y lo que quisieras. Estuve acompañado de nuevo por Pascual, un amigo y Juan, había quedado 3º. Pascual se fue con su amigo en los autobuses que la organización ponía para regresar a Burgos. Nosotros nos quedamos a esperar la llegada de Olalla y Cristina que venían con los andarines.
Ya era tarde, al menos para mí, eran las 2 de la mañana, así que vuelta a casa y a descansar.
Aún no había terminado el fin de semana. Por la mañana quedé con Juan, paseo por el centro, cañita y a la sociedad gastronómica el Capricho, donde de nuevo nos esperaba nuestro anfitrión. Nos juntamos unos cuantos alrededor de la mesa para dar cuenta de unos muy buenos manjares. El tan importante 3er tiempo. Una comida muy agradable en muy buena compañía. Muchas gracias por todo Pascual.
El tiempo pasó muy deprisa. Después de las despedidas quedamos en volver el año que viene, eso sí, la comida en esta ocasión con productos de Macotera.
Carrera divertida y muy recomendable, acompañada de un gran fin de semana. Acordaros, mayo de 2020, carrera nocturna de Modúbar. Allí nos encontraremos.
Saludos y un gran palante para todos/as. Nos vemos en los caminos.”